Truco para tus imperfecciones

La mejor forma de tratar las imperfecciones es procurar evitarlas. Límpiate la cara dos veces al día, por la mañana y por la noche, con leche limpiadora no comedogénica y sin fragancia. Utiliza productos de maquillaje especiales para pieles grasas y desmaquíllate siempre antes de ir a dormir.
Un corrector con ingredientes específicos para las imperfecciones como el ácido salicílico puede cubrirlas y tratar la piel a la vez. Algunos productos contienen fórmulas antiimperfecciones muy eficaces que pueden ayudarte a cubrirlas, tratarlas y evitarlas. Elige un tono que se asemeje al de tu piel y aplícalo directamente en la imperfección. Con la yema de los dedos, elimina el exceso de corrector y, si es necesario, ponte otra capa. Con una brocha, aplícate con cuidado polvo suelto específico para pieles grasas, para fijar el corrector.